¡Hola
otra vez! Aquí estoy de nuevo para hablaros de una forma distinta de trabajar:
TELETRABAJO. Algun@s pensareis que a buenas horas y a otr@s, os será de gran
utilidad. Quiénes ya sepan de qué va el asunto seguramente no lean nada nuevo, aunque
es posible que a ell@s también les pueda ayudar. Aquí en España todavía es un
concepto que está lejos de hacerse realidad, sólo un pequeño porcentaje de
empresas lo han implantado y a comparación de los países vecinos, nos queda
mucho camino.
Os
invito a una pequeña reflexión después de leer de qué va y cuáles son los
puntos débiles y fuertes que se esconden tras esta estupenda modalidad laboral.
Quizás quede algo extenso 😎🙏 ¡Son demasiadas cosas que contar!
¿QUÉ
ES ESTO?
El
Teletrabajo es una de las nuevas formas de trabajar y que cada día son más
personas las que lo hacen bajo esta modalidad. Esto es, trabajar desde casa
como si estuvieras en la oficina pero sin la necesidad de salir de casa o
desplazarte hasta allí. Tu oficina es el lugar en el que estés. Tu horario de
trabajo, eres tú quién lo distribuye salvo que por contrato o exigencias de las
tareas se disponga otra cosa. Lo que sí es fundamental para que se pueda dar
esta modalidad es la utilización de las Tecnologías de la Información y la
Comunicación (TICs).
Se
supone que el Teletrabajo está enfocado a ofrecer a distancia la venta de
productos y servicios al mundo entero, desde casa, por ejemplo, así de
sencillo. Realmente el concepto a
distancia hace referencia a trabajar en cualquier lugar salvo en la oficina
o centro de trabajo, siempre y cuando se disponga de dispositivos tecnológicos
y conexión a Internet.
El
hecho de que muchas empresas cuenten con trabajadores bajo esta modalidad y
trabajadores autónomos o freelance opten
por trabajar de esta manera, conlleva una seria de beneficios mutuos como la
disminución de los tiempos de desplazamiento y los tiempos muertos sin tareas a
realizar; trabajadores y trabajadoras que por algún tipo de limitación no
pueden transportarse físicamente al centro de trabajo y para las personas que
viven en países distintos u otros puntos de España diferentes al de su trabajo.
DESDE EL PUNTO DE VISTA DE TELETRABAJADORES REALES...
1. "¿Trabajas desde casa? ¿Pero eso se
puede hacer? ¿Y te pasas en pijama todo el día? Qué genial, así no tienes que
madrugar y puedes hacer lo que te dé la gana"
"Creo que la gente tiene ideas preconcebidas principales.
La primera es, desde casa no se trabaja. Mucha gente dice “qué bien, si no está mirando el jefe, no trabajarás mucho””, se
explica Iván López, desarrollador informático, que trabaja
desde España para una empresa con sede en Estados Unidos. "Requiere
mucha más disciplina y autocontrol. Estás muy cerca de la cocina, por lo que es
muy fácil dar paseos de vez en cuando a picar algo. También es fácil perder la
noción del tiempo y darte cuenta, a las 21 de la noche, que hacía unas cuantas
horas que deberías haber dejado de trabajar".
2.
"En general, parece que la gente piensa que
es menos trabajo si estás en casa. A algunos les cuesta entender que puedes
estar estresado o tener un día muy malo si trabajas a distancia. También es
frecuente que asuman que estás disponible durante tu horario de trabajo para “hacer alguna cosa” en casa o ir al
banco, y similares. Pero eso no es teletrabajo, es multitarea, u horarios
flexibles". Palabras de Inma Bermejo, Diseñadora Gráfica
3.
"Siempre digo que, desde que curro por mi
cuenta, no siento que existan los lunes. Ahora bien, tampoco los viernes. Yo
trabajo todos los días, aunque sea en finde, y si tengo que parar un martes,
paro". Palabras de María Santonja que trabaja en formación online.
4.
Valentina Morillo, que se dedica a la
comunicación digital, dice "cada cliente piensa que solo trabajas para
él/ella, y como te llaman al móvil, lo hacen a cualquier hora y te fastidian
todos los horarios y plannings".
5.
"Aunque teletrabajar nos remita instantáneamente a un ideal de
flexibilidad absoluta en el que cada empleado hace y deshace a
su antojo, lo cierto es que para que sea efectivo el teletrabajo dista mucho de
ser así. Y es que no se puede pasar de trabajar en una oficina a hacerlo en el
propio domicilio sin adoptar algunas medidas". Arancha de las Heras,
directora general del Centro de Estudios Financieros, explicaba esto en un
artículo sobre Teletrabajo publicado en El
Economista.
6. Hay que marcarse
rutinas. Inma, por ejemplo, tiene su día perfectamente organizado.
"Sí tengo un horario fijo que trato de respetar al máximo. Dos tipos de
horario en realidad, uno de mañana y tarde, y otro sólo de mañana. Los combino
según me conviene cada semana" y pasa a detallar que "me levanto a
las 6.50, desayuno y me visto como si fuera a salir. Excepto las zapatillas de
casa, que me las permito. Empiezo a trabajar a las 7:30 e intento no
comunicarme con la oficina hasta las 10 o 10:30, ya que ésas son mis horas más
productivas. A partir de esa hora, hago un breve descanso y suelo poner las
reuniones".
VENTAJAS
Y DESVENTAJAS
Las
ventajas individuales también son numerosas, como por ejemplo la empresa, que
tendrá menos conflictos entre sus empleados, la implementación de objetivos en
el trabajo equivale a una mayor productividad y motivación en el trabajador, el
coste de producción e menor, tiene más acceso a profesionales de alto nivel, el
absentismo laboral disminuye y aumenta muy positivamente la facilidad de
expandirse geográficamente sin necesidad de cambios estructurales. Parece que a
las empresas les interesa.
Más
ventajas, los trabajadores también obtienen sus ventajas como mayor autonomía,
mayor flexibilidad y mayor movilidad. Es importante también para ellos y ellas
la cantidad de oportunidades laborales y de desarrollo profesional a las que
pueden optar. La conciliación con la vida familiar es fundamental y con el
Teletrabajo se logra a la perfección. De esta forma se eliminan los tiempos en
desplazarse, tráfico, aparcamiento, etc. con lo que se reduce el estrés un alto
porcentaje. Parece que al trabajador también le interesa.
Sin
embargo, como todo también el Teletrabajo también cuenta con alguna otra
desventaja. Veamos cuáles. La falta de ambiente laboral y la disminución de
relaciones sociales, puede contribuir al incremento en los conflictos
familiares, por ejemplo. Además, el trabajo realmente no llega a separarse del
todo de la vida familiar o del ocio.
Como
desventajas para cada uno de los colectivos, para la empresa supone la pérdida
importante de la participación del trabajador en la organización y también la
pérdida de comunicación o contacto con él, perdiendo también calidad en cuanto
al trabajo en equipo. El aumento de costes, por ejemplo, en la instalación de
los equipos, conexiones y problemas técnicos. Otra desventaja es la falta de
control presencial por parte de los superiores, lo que a su vez puede generar
beneficio en el trabajador – al sentir éste menor presión.
Hablemos
de los inconvenientes para el trabajador. Uno de los que más importancia tiene
para mí, es el aislamiento, la soledad y la pérdida de relaciones
interpersonales dentro del trabajo, bajo mi punto de vista son fundamentales
puesto que a la larga puede generar inseguridades en el individuo. Otro
inconveniente, es la fina línea que hay entre el trabajo y la vida privada y
familiar. Además, una de las cuestiones más importantes es la falta de marco o
estatuto regulador para esta modalidad de trabajo, por lo que se puede entender
que hay falta o necesidad de protección laboral y social.
IMPACTO
EN LA SOCIEDAD
Si lo
pensamos bien, la sociedad también puede beneficiarse de todo esto
manteniéndose ajena a esta modalidad de trabajo. Lo primero es que se reduce el
estrés y la insatisfacción laboral de muchos individuos que suman a su
felicidad el no desplazarse a primera hora de la mañana, lo que equivale a
disminución de problemas de circulación, disminución de accidentes y, como no,
menor contaminación; además de la disminución de la depencia económica del
petróleo, la economía sale beneficiada en este aspecto. Se reducen costes al
Estado provenientes de accidentes de tráfico porque al reducir estos, se
reducen los gastos en salud y medicina descongestionando los hospitales y salas
de urgencias. No obstante, podemos observar también alguna que otra desventaja
para la sociedad, como por ejemplo la disminución a corto plazo de las
relaciones interpersonales y/o sociales, lo que genera unas nuevas relaciones
distintas y superficiales. Otro problema que puede presentar el Teletrabajo en
la sociedad es que no todos los individuos tienen acceso o manejan las TICs, lo
que aparta de esta modalidad a ciertos colectivos. Y el último inconveniente,
tiene relación con lo antes mencionado en cuanto a la regulación de estos
trabajadores, pues al carecer de ella, se resta eficacia a la normativa que ya
hay y que se refiere a las condiciones y medio ambiente del trabajo.
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